Hay que reconocer que la falta de rutina del día del cine, hace que a uno se le pasen los días volando y cuando se da cuenta, ya ha pasado más de una semana... motivo por el que, sin darme cuenta no estoy cumpliendo religiosamente con mi día semanal... aunque espero que sepáis perdonarme.
Esta semana la película que traigo es por recomendación de InSitgesWeTrust, una cuenta de twitter que trata de cine que suele hacer recomendaciones de películas y, en ocasiones series.
Aunque la temática parezca asiática, no es para nada de origen del país del sol naciente, mas al contrario, la realización ha sido en USA, aunque la historia sí que podría definirse como basada en una leyenda asiática.
La película trata sobre la historia de un crío llamado Kubo, siendo un bebé su abuelo le extirpó un ojo, de modo que su madre huyó con él en busca de un lugar seguro. Kubo se crió con su madre siempre vigilando de volver siempre antes del anochecer. Ganándose la vida contando historias con su particular magia, dando vida a los personajes que crea de origami.
La historia parece bastante normal, hasta que empiezan los intríngulis.
En cierto modo, se podría decir que la historia es previsible, típica tópica, aunque si bien es cierto que la realización es bastante sorprendente, puesto que los papeles toman un papel similar al de un personaje más, siendo algo más que un simple atrezzo.
Igualmente, el papel de los dos personajes que se agregan, la mona y el samurái escarabajo, se podrían considerar hasta cierto punto típicos ayudantes del protagonista de las leyendas niponas. Aunque, es este caso el papel que tienen es un tanto más... especial que ser simplemente sus ayudantes.
Otro detalle que puede ser interesante, es la introducción de algunos detalles de la cultura nipona que no son simplemente mostrados, sino que además, son explicados dándoles un sentido y un significado.
Algo que puede hacer previsible la historia, es el conocimiento de la cultura religiosa japonesa, al menos, lo que eran sus orígenes, cuando hablamos de Amaterasu (Diosa Sol) y Tsukoyomi (Dios Luna). Con el agregado que si nos fijamos, podemos ver en los distintos personajes que tienen relación con la Luna, las 4 fases lunares.
Obviamente, no desvelaré quién es quién puesto que sería ya desvelar parte del misterio y, con ello, parte de la gracia de la película.
Aun así, es interesante ver la manera de ir desvelando los hechos y los giros de guión, algunos más esperados que otros, aunque impresionantes.
Por cierto, no caer en el error de pensar que al instrumento de Kubo le faltan dos cuerdas y de ahí el título. En realidad se trata de un shamisen, un instrumento tradicional japonés de tres cuerdas que se toca con una especie de pala. Igualmente, la referencia a las dos cuerdas mágicas es respecto a la constante dualidad que se muestra a lo largo de la película.
Y como curiosidades está que el Demonio Esqueleto (basado en Gashadokuro, del folklore japonés) es la marioneta más grande construida para el stop-motion, además es la película realizada en stop-motion hasta la fecha, superando de 1 minuto a Coraline. El director comentó que la película es un homenaje a Akira Kurosawa y Hayao Miyazaki (quienes le sirvieron de inspiración) y los Beatles (como se ve en los créditos finales) para los momentos musicales de su familia. Siguiendo con el folklore, la danza que del festival es "Tanko Bushi" que se suele realizar durante los festivales de Obon, además, la gallina que se muestra al principio, existe como un yokai llamado "Basan". Los nombres de las Hermanas, Karasu y Wahi, significan Cuervo y Águila en japonés.
Conclusión: Aunque sea una producción norteamericana, el espíritu que se respira a lo largo de la producción es japonés, distinguiéndose de lo habitual que sería en estos casos. Por lo que nos encontramos con una historia excepcional con unas situaciones que, si bien es cierto son esperadas, incluso típicas, se puede ver el toque nipón, pues nos muestra una faceta o una manera que es distinta a la que se nis podría haber ocurrido.
Aunque la duración sea de casi 1h45 (1h41min), se pasan casi sin darse uno cuenta, pudiendo apreciar la gran labor realizada al ser en stop-motion, con los detalles realizados a mano, lo cual le da un mérito mayor al trabajo realizado.
Además, permite conocer detalles de la cultura japonesa para quien no esté versado, pudiendo abrir una ventana a descubrir algunas curiosidades de una cultura tan ancestral.
La película da ocasión para risas, emoción, intriga, incluso tiene algún momento cebollero, pero es prácticamente inevitable, llevando un control de los tiempos y de los momentos, muy bien llevado. Sin olvidar la fotografía, pues muestran escenas de una belleza increíble, además de lo cuidado de la imagen.
Puntuación: 8/10 (Si no supiera el origen de la producción, hubiese jurado que era japonesa de lo bien hecho que está)
PD: En los créditos finales se puede ver como montaron y animaron a Gashadokuro (una firma típica de los estudios Laika, mostrar algún making of de la película)
No conozco mucho de cine japonés, hace mucho vi una película en blanco y negro pero no recuerdo casi nada, pero se hizo famoso el director. Abrazos
ResponderEliminarEn realidad, aunque lo parezca, pues tiene muchos rasgos, no es cine japonés, en este caso.
EliminarAbrazos
Hace mucho que la vi con mis hijos y creo recordar que nos gustó.
ResponderEliminarGracias a ti acabo de descubrir que no es japonesa.
Besos.
Precisamente, yo pensaba que me iba a decepcionar sabiendo su país de origen y ha sido totalmente al contrario.
EliminarCreo que ha sido gracias a la productora que ya tiene bastante experiencia en ese tipo de películas.
Besos