Sinopsis
El caso de una paciente maltratada y aterrorizada se convierte en la pesadilla de la psiquiatra Ellen Roth. La mujer teme ser secuestrada por el hombre del saco. Se lo susurra a Ellen y luego desaparece sin dejar rastro. Nadie la ha visto ni sabe nada de ella. Ellen quiere encontrarla. Pero al intentarlo, se ve involucrada en un macabro juego del que no sabe como salir para salvar a la paciente y a sí misma. Solo puede intentar encajar las piezas de un rompecabezas diabólico. Mientras se precipita a un abismo de violencia, paranoia y terror, descubre que los problemas nunca no se arreglan solos…A ver, para que vamos a engañarnos, llevo el reto de Hastur tremendamente mal. Esta reseña era la del mes pasado y eso que aún no he empezado la de este mes. ¿Bloqueo lector? Puede, puede. Porque además estoy intentando leerme uno finito, tan pequeño que te dices que en una tarde me lo leo... pues no, ahí está, cogiendo polvo. En fin, que no me enrollo más. Espero que sepáis disculpar las tardanzas de según que cosas... 😅
Compuesto por un total de 48 capítulos (con su prólogo y epílogo), Dorn nos presenta a la Doctora Ellen Roth y un caso sumamente misterioso que parece degenerar poco a poco en una auténtica locura. A pesar de que todo comienza en el psiquiátrico donde nuestra doctora trabaja, lo cierto es que es solo un telón de fondo, ya que la mayor parte de las acciones y vivencias transcurren fuera de este. A lo largo del libro, además, Dorn nos va dando pequeñas migas de pan para que resolvamos la identidad del misterioso hombre del saco. Es difícil, pero no imposible.
En la segunda parte, llamada "El monstruo", se nos es desvelado el final. El apoteósico final. Aún a pesar de que se nos da la llave para entender todo el misterio, lo que más me ha gustado es que Dorn no tiene ninguna prisa por terminar el libro, cosa que el lector lo nota muy intensamente. Aunque nos den la ansiada clave y se resuelva el misterio, la novela de La Psiquiatra continúa un poco más, dando tiempo al lector para despedirse de tan variopintos personajes y para responder a todas las dudas que pudieran asaltarle a lo largo de la lectura. Ciertamente, se agradece que haya sido escrita con tanto cuidado.
Otro apunte llamativo es la cortesía de Ellen Roth hacia cualquier parte. No sé si será cosa del traductor (mi alemán es muy escaso, por no decir nulo) pero algo que me hizo mucha gracia es que esta mujer trata de usted hasta a la gente más peligrosa. Quiero decir, pongamos que se está pegando con el asesino. Pues lo tratará de usted. No se permite el tuteo. ¿Curioso, no?
Un término con el que me quedo de este libro es "Criptestesia", que viene a ser cuando sabes que estás soñando. No sabía ni que tenía nombre eso, fíjate tú.
También he de añadir que Dorn ha caído en el típico mito de que a los gatos del gusta la leche. Es algo tan viejo y manido como que a los ratones les pirra el queso, pero en verdad, a no ser que estén acostumbrados desde pequeños a beber leche de vaca, les suele resultar un tanto indigesta, porque no pueden procesar bien la lactasa.
- Conocer el término criptestesia.
- El recorrido final, en el que Dorn da tiempo a asimilar y resolver dudas.
- La división del libro en dos mitades muy bien definidas.
- El libro va dejando una serie de pistas para poder resolver el misterio.
- Roth y su cortesía, en serio, me ha marcado mucho.
~Lo que no me ha gustado~
- Esto es muy personal, pero el motivo u origen de todo.
En conclusión, La Psiquiatra me ha encantado. Con sus 376 páginas en físico, Dorn ha sabido cómo captar la atención del lector, desde el inicio hasta el final. Y aunque muchos piensen que dar con el asesino en este tipo de novelas, he de decir que con Dorn, al menos en esta novela, ha sido bastante sencillo, en comparación con, por ejemplo Fitzek o Katzenbach. Yo lo dejo caer. Espero que os sirva de incentivo.
Puntuación: 8/10
·Citas que me han gustado del libro·
"[Refiriéndose a Sigmund, un gato] -Dulces sueños, mi peludo calentador -murmuró Ellen, justo antes de apagar la luz."
"<<Si algo sale mal di que es por culpa de la informática, y a todos les parecerá lógico>>."
"¡Cobarde, gallina, capitán de la sardina!"
"Escribir puede ser una empresa muy dura, pero también el mejor trabajo del mundo."
Hola! cuanto tiempo sin pasar por aquí. No me apetecía el titulo pero casi me convences y puede que después de las fiestas le de una oportunidad. Lo que te doy ahora son un par de abrazos
ResponderEliminarTiene buena pinta pero no me va el género. Un beso
ResponderEliminarHola Ikana, pues me ha gustado lo que explicas del libro. Me gustan ese tipo de misterios.
ResponderEliminarNosotros decimos" cobarde, gallina, capitán de las sardinas"... es un insulto clásico!
Besos
ResponderEliminarشركة ماسة لمكافحة الحشرات بالخبر